Preguntas Frecuentes

Cuando se trata de intervenciones asistidas con animales, pueden haber muchas confusiones. Aquí en CORICA IAA, te aclaramos las dudas más comunes

  • En CORICA trabajamos con perros, como animal de terapia.

    • Actividades lúdicas: solo es necesaria la participación del técnico y/o experto en IAA, junto con el perro, son actividades puntuales sin objetivos a largo plazo.
    • Educativas: es necesaria la presencia de un profesional en educación, además de la participación del técnico y/o experto en IAA y el perro. Son intervenciones con objetivos educativos que deben ser medibles y evaluables.
    • Terapéuticas: es necesaria la presencia de un profesional de la salud, además de la participación del técnico y/o experto en IAA y el perro. Son intervenciones con objetivos terapéuticos que deben ser medibles y evaluables.
  • Son perros que se seleccionan y entrenan para incluirlos dentro de intervenciones lúdicas, educativas y terapéuticas. Pueden trabajar en una variedad de entornos, como hospitales, escuelas, hogares de ancianos e incluso en la casa de alguien que necesite su ayuda.

    No están entrenados para realizar tareas específicas, a diferencia de los perros de asistencia, y no tienen los mismos derechos legales que los perros de asistencia. En cambio, los perros de terapia participan de forma activa o pasiva en procesos de recuperación, educación y diferentes actividades, con una gran variedad de poblaciones.

  • Para evaluar y entrenar un perro para terapia, la persona interesada debe tener una formación como técnico y/o experto en IAA. Una vez verificada la formación, se realiza una evaluación del perro. Al pasarla, se inicia el entrenamiento en habilidades específicas para terapia.

  • Cualquier persona puede solicitar el servicio de intervenciones asistidas con perros. Primero se realiza una reunión para determinar qué tipo de intervención se requiere y posteriormente se realiza en conjunto el plan de trabajo.

  • Los perros de asistencia son entrenados para realizar tareas específicas que ayudan a personas con discapacidades físicas o mentales a vivir con mayor independencia y autonomía. Estos perros tienen derechos legales especiales y pueden acompañar a sus dueños a todas partes, incluyendo lugares públicos donde los animales normalmente no son permitidos.

  • El perro de asistencia se selecciona y entrena desde cachorro. Por lo que no se entrenan perros que ya tenga la persona interesada.

    Si deseas más información sobre la selección y entrenamiento con gusto te ayudamos, no dudes en consultar.

  • Sí, según está estipulado en la Ley 7600, que puedes ver dando click aquí, la persona usuaria tiene el derecho de libre acceso con su perro de asistencia en todo espacio público y privado.

    “Artículo 176.-Animales de Asistencia

    Toda persona que por algún tipo de discapacidad requiera de un animal de asistencia como apoyo, acompañamiento, conducción y auxilio, lo podrá ingresar, permanecer y deambular a toda edificación pública, privada de servicio público y medio de transporte público”

  • Todo el proceso, desde la selección hasta la entrega, dura entre uno a dos años aproximadamente.

  • Son perros que brindan consuelo y apoyo emocional a una persona. Sin embargo, estos perros no están específicamente entrenados para realizar tareas específicas y no tienen los mismos derechos legales que los perros de asistencia.

  • El profesional en psicología, es el encargado de certificar que una persona necesita de un perro de apoyo emocional.

  • Si bien un perro de apoyo emocional no se certifica, se puede realizar una evaluación del temperamento y habilidades sociales, para determinar si se va a desenvolver correctamente en espacios públicos o privados. Al pasarla, se iniciaría el entrenamiento correspondiente.

  • El perro de apoyo emocional no cuenta con los derechos por ley para ingresar a espacios públicos o privados pues no es un perro de asistencia. El ingreso o no, va a depender de cada establecimiento.

  • El perro de asistencia se selecciona, educa y entrena desde cachorro, para cumplir una función específica de asistencia para la persona que lo necesite. El perro de apoyo emocional no cuenta con un entrenamiento específico, cumple la función únicamente de acompañamiento para la persona que lo necesite

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